Lo único que podríamos decir después de haber ido de teatro en teatro y de hotel en hotel, es, que una cosa es rechazar y condenar y otra cosa es educar, amar, ser naturaleza.
La única forma en que el teatro puede ser un rito, es, cuando ustedes los humanos sean armonía con la naturaleza.
Cuando el hombre dejó de ser... de ser armónico con la naturaleza... apareció el drama.
Cuando actuamos, manejamos y somos limpios y castos para el público...
Cuando lo nuestro está ordenado y seguimos siendo limpios y la gente nos quiere...
Aún nos falta algo...
Nuestra sociedad no acepta que todos nosotros seamos tiernos... para... querer ser sinceros...
Somos los únicos que podemos y nos burlamos de las cosas, cosas que ustedes humanos y titiriteros llaman divinas.
Como títeres no pretendemos preguntar ¿Usted qué es?, sino, ¿La sociedad que cree ?
En la medida en que podemos saber que todos somos seres... seres tiernos... pero que no sabemos de dónde venimos ni para dónde vamos...
Podemos empezar a comprender que somos títeres.
Títeres de un Dios incomprensible que ustedes vivos y pensantes pueden creer saber que existe.
Si de algo nos burlamos nosotros los títeres, es de la forma de ser. ¿Ustedes qué son ?
Amantes de la mujer: Madres, hermanas, esposas, hijas, amantes, cariñosas... todas mujeres.
¿A cuántos de ustedes les cuesta compartir un querer... ?
¿Y amar... ?
Amar les cuesta agachar la cabeza sobre la sopa.
Hasta dónde cuántos de nosotros no somos manejados, porque ¿Ustedes quieren simplemente ser titiriteros ?
De su manejo, titiritescamente...
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